La ciencia ficción es un campo inmenso; un cielo abierto por explorar. En ella caben todos los sueños, todas las pesadillas que la mente humana pueda imaginar.
Paris habilitado se podría inscribir en un subgénero de la ciencia ficción de reciente cuño: el policronismo mágico, definido como Un viaje hacia lo trascendental y el sentido de la maravilla, donde los distintos instantes del universo que rigen un mismo hilo narrativo, acogen singularidades que visten, al tiempo, un halo de cotidianeidad.
Génesis de Paris habilitado:
Paris habilitado fue en su origen un relato con el que participé en un curso online de Escritura creativa. Jorge Magnano, que dirigió el taller superior, hizo la siguiente valoración:
La historia que cuentas es capaz de generar esa ambientación propia de la ciencia ficción más interesante y compleja. La gran baza de «Paris habilitado» es su capacidad de evocación más allá de una trama que puede no resultar comprensible por todo tipo de lector y que, sin embargo, mantiene atrapado debido a su inquietante atmósfera y a su conexión emocional con el protagonista.
Una historia debe ser, ante todo, humana. Tratar temas, conflictos y personajes que conecten con nuestras propias inquietudes. Esta historia lo consigue. Atrapa, interesa, nos identifica con el drama del protagonista y llega a emocionar. Además, plantea preguntas y deja abiertos agujeros que el lector debe encargarse de rellenar. Porque la buena ciencia ficción, debe plantear preguntas, no aportar respuestas. Esa es la clave del misterio y la ciencia ficción, dos géneros que se dan la mano en este relato hipnótico, fantástico y a la vez verosímil.
A modo de presentación
