GERMEN

   Nace el germen de una idea, punta de lanza de un ovillo del que ir tirando sin tirar, despacio, como el tallo crece  hasta dar sombra. Nace así la trama. Al principio no son hojas en blanco, sino escenas, pensamientos nebulosos que irán definiendo la forma corpórea de un personaje y su voz: murmullo de vivencias con las que creció. Abrirá capítulos con ellas. Su sentir dará aliento a sus iguales. Nació con él su problema vital, su impreciso desenlace. Pero dejas que haga su camino, que llene páginas de un diario imaginado. Si eres fiel a ti mismo, harás del lector su  cómplice.

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